La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia, constituyendo entre el 60 % y el 70 % de los casos totales en el mundo. Luchar contra ella e intentar que su progreso se retrase lo máximo posible es algo en lo que la ciencia lleva trabajando años de forma incansable.

Recientemente, la FDA ha aprobado un nuevo medicamento con nombre Leqembi, el segundo de una nueva categoría de medicamentos aprobados para la enfermedad de Alzheimer que se dirigen a la fisiopatología fundamental de la enfermedad.

Leqembi fue aprobado mediante la vía de Aprobación Acelerada, en virtud de la cual la FDA puede aprobar medicamentos para enfermedades graves cuando existe una necesidad médica y se demuestra que un medicamento tiene un beneficio clínico para los pacientes.

Sin embargo, la ciencia vuelve a dar un paso más allá y acaba de demostrar que existe algo más potente que este medicamento: Duolingo.

Duolingo ya ha demostrado ser más efectiva contra el Alzheimer que los medicamentos

Parece una locura, pero así lo han demostrado varios estudios que comparan esta aplicación o el aprendizaje en general de nuevos idiomas con el tratamiento del Alzheimer. Para ser justos, no estamos hablando de que estas apps solucionen el problema, pero una gran cantidad de estudios publicados han demostrado que hablar dos idiomas ofrece una notable protección contra esta enfermedad.

Para aclarar primero de qué hablamos, por si alguien anda perdido, Duolingo es una conocida aplicación para teléfonos que ayuda a los usuarios a aprender otros idiomas, haciendo ejercicios sencillos y entretenidos todos los días para practicar.

Ellen Bialystok, profesora de investigación del Departamento de Psicología de la Facultad de Salud de York, y su equipo pusieron a prueba (con éxito) la teoría de que el bilingüismo puede aumentar la reserva cognitiva y retrasar así la edad de aparición de los síntomas de la enfermedad de Alzheimer en pacientes ancianos.

En pocas palabras, afirman que aprender otro idioma, aunque no se domine, ayuda a estimular la salud cerebral. En otro estudio, se realizó un seguimiento específico de un grupo de adultos de entre 65 y 75 años a los que se asignaron 16 semanas de aprendizaje de español con la aplicación Duolingo.

Los resultados se compararon con los de un grupo de control que no realizó la tarea, constatando que la salud cerebral de los primeros mejoró con respecto a los segundos. 

“Además de los beneficios cognitivos, el aprendizaje de un segundo idioma puede enriquecer la vida de los adultos mayores de otras maneras importantes, por ejemplo, al dar lugar a nuevas amistades o abrir la puerta a una nueva cultura o a viajar, ayudándoles a vivir la vida al máximo”, explican.

Estos resultados contribuyen al cada vez más alto número de pruebas que demuestran que los bilingües son más resistentes a la neurodegeneración que los monolingües. Funcionan a un nivel superior gracias a la reserva cognitiva, lo que significa que muchos de estos individuos serán independientes durante más tiempo, haciendo frente de una mejor forma al Alzheimer.