Para grabar vídeos, realmente no necesitas un estudio de producción de alta gama. Todo lo que tienes en el bolsillo es más que suficiente para crear vídeos impresionantes, sobre todo si el hardware del smartphone acompaña. Sin embargo, aunque sea fácil, no todo el mundo sabe cómo aprovechar al máximo su teléfono mientras graba un vídeo.
Por ello, antes de pulsar el botón de grabación, debes conocer las posibilidades y limitaciones de tu teléfono. Infórmate de las nósticas que tiene, el tipo de lentes con el que cuenta, si alguna de ella tiene OIS, es decir, sistema de estabilización óptica, cuáles de las cámaras que encuentras en la parte posterior tienen herramientas de auto-enfoque, etc.
Cuanto más sepas de tu smartphone, mejores vídeos podrás grabar, adaptando el contenido a capturar a las posibilidades de tu móvil.
Trucos para grabar vídeos
Como dice el refrán, ‘cada maestrillo tiene su librillo’ y decirte cómo debes grabar vídeo puede ser demasiado radical si no atendemos a la subjetividad del creador, es decir, tú. Por eso, los consejos que esgrimimos a continuación, no tienes que seguirlos a pies juntillas. En función de lo que quieras crear, toma uno u otro, pero siempre intentando sacar la máxima calidad posible en tus grabaciones.
Evita grabar en vertical
Por alguna extraña razón, los gigantes tecnológicos incluyeron una opción para grabar imágenes verticales o de retrato con un teléfono inteligente. Si bien esto puede tener sentido con un dispositivo que tiene una pantalla en orientación vertical, esto no se traduce bien en ningún otro dispositivo. Si lo que quieres es ver tu creación en pantalla grande, vas a tener que depender de los monitores de ordenador, los televisores y otros dispositivos, es decir, con pantallas apaisadas. A expensas de que el mundo cambie para siempre, todavía vivimos en un mundo de pantallas horizontales y, por consiguiente, el contenido generado debe ir en consonancia.
Sin embargo, somos conscientes de que cada vez es más importante grabar buenos vídeos para redes sociales como TikTok o Instagram y por ello, hay circunstancias donde si nuestra finalidad está en publicar los contenidos, tenemos que optar por grabar en vertical, dado que en caso contrario tendremos que estar adaptando los archivos.
Usa un trípode / estabilizador
Si no quieres que tus imágenes de vídeo salgan movidas, borrosas o afectadas por el ‘tembleque del cámara’, lo mejor que puedes hacer es mantener tu teléfono estable mientras grabas. El truco perfecto para ello es usar ambas manos para sostener tu smartphone lo más cerca posible de tu cuerpo mientras grabas el vídeo, pero como esto puede ser un poco agotador en grabaciones largas hay otras formas de sujetar al teléfono: Los estabilizadores.
Da igual que uses un pequeño trípode, una steady-cam para smartphones u otro sistema de estabilización. Todo lo que te permita mantener tu teléfono quieto mientras haces un vídeo le dará al resultado una calidad cinematográfica. Si no quieres gastar dinero, recuerda que también puedes apoyar tu terminal en otros soportes físicos como mesas, sillas, libros, etc.
Apoyate en las fuentes de luz
A diferencia de cámaras profesionales, una buena iluminación es crítica y tiene un gran impacto en las cámaras de los teléfonos, ya que los mismos, tienen sensores de imagen y lentes más pequeños que las cámaras tradicionales. Por ello debes trabajar siempre lo más cerca de las fuentes de luz, ya sean naturales o artificiales, si quieres que tu vídeo tenga una calidad por encima de la media.
Esto ayudará a evitar sombras innecesarias y áreas llenas de ruido generado automáticamente por software en tu grabación. También debes tener cuidado de no apuntar con la cámara directamente a las fuentes de luz brillante, ya que corres el riesgo de generar escenas demasiado expuestas que no servirán para nada.
La iluminación, además, tiene que ser uniforme. Los sensores de imagen en la mayoría de los smartphones no reaccionan a los cambios drásticos y rápidos, por lo que, en la medida de lo posible, evítalo y cambia la configuración del balance de blancos de tu app para obtener siempre el mejor resultado posible.
Usa un micrófono externo
Muchos nos olvidamos de que, en el cine, el audio importa tanto como el vídeo: un buen vídeo con mala calidad de audio es prácticamente inútil, igual que un clip con un sonido excepcional no sirve de nada si la imagen no acompaña.
Lo malo es que muchos confiamos en el micrófono incorporado en el equipo y este es, en muchas ocasiones, lamentable. No solo es de baja calidad, sino que también se coloca incorrectamente ya que, cuando grabas en horizontal, lo tapas con las manos al ubicarse en la parte inferior del teléfono. Además, es muy fácil que se cuelen ruidos ambientales innecesarios que entorpecerán cualquier audio importante mientras graban vídeo en el exterior. Así que, para vídeos de gran calidad con audio igualmente bueno, plantéate conseguir un dispositivo de grabación externo o un micrófono direccional.
Prueba otras apps de grabación
La aplicación de la cámara de tu smartphone puede hacer un buen trabajo, pero en las tiendas de iOS y Android existen muchas apps que seguro lo van a hacer mejor. Algunas permiten controlar el nivel de entrada de audio, otras mantener el enfoque manual a raya, otras gestionan mejor el color, la mayoría tienen herramientas más potentes de edición, etc.
La mayoría de las aplicaciones de terceros son muy intuitivas y cuentan con excelentes características para aquellos que son novatos en el campo de la creación de contenido. Si bien hay algunas apps gratuitas bastante buenas, invertir algo de dinero en una de las siguientes opciones nunca estará de más, pues tus resultados lo agradecerán.
Consejos para grabarte a ti mismo
Como ya habréis notado, no es lo mismo apuntar y disparar, o capturar, que grabarse a uno mismo. Cuando somos nosotros los protagonistas de nuestras grabaciones, además de seguir la mayoría de consejos que os acabamos de dar, hay que sumar unos cuantos más.
Usa la cámara trasera
La cámara de la parte posterior de un teléfono suele ofrecer imágenes de mejor calidad que la de la parte delantera, algo que debemos tener muy en cuenta. Por lo tanto, si estás interesado en producir un vídeo de primera categoría con tu teléfono, usa siempre la cámara trasera y principal del smartphone, alejándote también del ultra gran angular y del teleobjetivo.
Sabemos que es algo más incómodo porque no podrás verte al mismo tiempo que grabas, pero basta con hacer un par de pruebas de encuadre previas para que, después, te acostumbres a grabarte sin necesidad de verte todo el tiempo.
Nada de zoom digital
Al igual que, para grabar otro tipo de vídeos sí que podemos utilizarlo, por mucho que quieras usar la función de zoom de tu teléfono, no lo hagas. Pocos teléfonos tienen zoom óptico y el zoom digital presente en casi todos los smartphones no agranda la imagen ópticamente, lo que significa que lo que vas a ver son píxeles más grandes. Y eso, cuando grabamos rostros, queda realmente mal.
Por lo tanto, mientras aprendes a grabarte con un teléfono te recomendamos prescindir de la función de zoom, a menos que tu teléfono cuenta con zoom óptico o un teleobjetivo, motivo por el cual antes hablamos de que debes conocer lo que ofrece tu terminal.
Mira a las lentes
Mientras grabas tu vídeo, mira en la lente en lugar de a la pantalla, si estás usando la cámara frontal. Pero, como ya os hemos aconsejado, es mejor usar las cámaras traseras, por lo que, aun así, te recomendamos mira a la cámara si quieres grabar bien y que el resultado sea la envidia de todos.
El motivo no es otro más que, al centrarnos en la lente de la cámara, vamos a conseguir dar la percepción de que estamos mirando a los ojos de nuestros espectadores.
Prueba todas las veces que necesites
Mientras que, cuando grabamos de forma natural con las lentes traseras, controlando toda la toma desde la pantalla, tenemos el control total de la grabación, cuando nos grabamos a nosotros mismos, esto no es así.
Por ello, antes de grabar tu vídeo con el teléfono, repasado todo para asegurarte de que todo esté en su lugar. Graba durante unos segundos para comprobar la iluminación, el encuadre, el enfoque y casi todo de lo que hemos hablado para hacer que tu vídeo destaque.
Mejor perder un par de minutos antes que repetir todo el trabajo después.